Ene/12 Gn. 37-39 Jose

2. La familia de Jacob: Las consecuencias de la poligamia se revelaron en la familia. Este terrible mal tiende a secar las fuentes mismas del amor, y su influencia debilita los vínculos más sagrados. Los celos de las varias madres habían amargado la relación familiar; los niños eran contenciosos y contrarios a la dirección, y la vida del padre fue nublada por la ansiedad y el dolor.

José: cuya rara hermosura personal parecía reflejar la hermosura de su espíritu y su corazón. Puro, activo y alegre, el joven reveló también seriedad y firmeza moral. Escuchaba las enseñanzas de su padre y se deleitaba en obedecer a Dios. La benignidad, la fidelidad y la veracidad aparecían ya en su vida diaria.

2. Informaba a su padre la mala fama de ellos: Al ver José la mala conducta de sus hermanos, se afligía mucho; se atrevió a reconvenirlos suavemente, pero esto despertó tanto más el odio y el resentimiento de ellos. A José le era insufrible verlos pecar contra Dios, y expuso la situación a su padre, esperando que su autoridad los indujera a enmendarse. Jacob procuró cuidadosamente no excitar la ira de sus hijos mediante la dureza o la severidad. Con profunda emoción expresó su ansiedad respecto a ellos, y les suplicó que honrasen sus canas y no cubriesen de oprobio su nombre; y sobre todo, que no deshonrasen a Dios, menospreciando sus preceptos. Avergonzados de que se conociera su maldad, los jóvenes parecieron arrepentidos; pero sólo ocultaron sus verdaderos sentimientos, que se exacerbaron por esta revelación de su pecado.

3. Amaba Israel a José más que a todos sus hijos: La preferencia de Jacob por José era natural, no sólo quizá porque veía en él al hijo de su amada Raquel, sino también por la excelencia de su carácter. Habiendo muerto su madre, sus afectos (de José) se aferraron más estrechamente a su padre. Imprudentemente Jacob dejó ver su predilección por José, y esto motivó los celos de sus demás hijos.

3. Le hizo una túnica de colores: costosa como la que usaban las personas de distinción. Suscitó la sospecha de que pensaba excluir a los mayores de su derecho a la primogenitura. 

8. Y lo contó a sus hnos.: Esto revela una clara inmadurez de juicio, porque ya él había visto su reacción.

10. ¿Qué sueño es este?: No obstante la aparente severidad de estas palabras, Jacob creyó que el Señor estaba revelando el porvenir a José.

11. Y sus hnos. le tenían envidia: En aquel momento en que el joven estaba delante de ellos, iluminado su hermoso semblante por el Espíritu de la inspiración, sus hermanos no pudieron reprimir su admiración; pero no quisieron dejar sus malos caminos y sintieron odio hacia la pureza que reprendía sus pecados. El mismo espíritu que animara a Caín, se encendió en sus corazones.

12. Fueron sus hnos. a apacentar las ovejas de su padre: Los hnos. estaban obligados a mudarse de un lugar a otro, a fin de procurar pastos para sus ganados, y a veces quedaban ausentes de casa durante meses. El aprovechamiento de los campos de pastoreo del norte implica que era verano o comienzos del otoño. La estación seca comenzaba en abril y duraba hasta octubre.

Siquem: era una ciudad floreciente y fortificada, situada en la entrada oriental de un angosto valle franqueado por los montes Ebal y Gerizim, ocupaba un lugar estratégicamente importante. Es un lugar desierto hoy día, llamado Balatah, cerca de Nablus. Está a unos 100 km. al norte de Hebrón. La razón para que los rebaños pacieran en Siquem puede haber sido porque la familia de Jacob tenía propiedades allí.

13. Mira cómo están tus hnos.: Pasó algún tiempo, sin noticia de ellos, y el padre empezó a temer por su seguridad, a causa de la crueldad cometida antes con los siquemitas. Si Jacob hubiese conocido los verdaderos sentimientos de sus hijos respecto a José. . .pero éstos los habían ocultado cuidadosamente.

17. José fue tras sus hnos. y los halló: Ya había viajado más de cincuenta millas, y todavía le quedaban quince más; pero se apresuró, olvidando su cansancio, con el fin de mitigar la ansiedad de su padre y encontrar a sus hermanos, a quienes amaba, a pesar de que eran duros de corazón con él.

Dotán: A unos 19 km. al norte de Samaria, en la dirección de Esdraelón, a unos 25 km. al noroeste de Siquem. Situada en la gran ruta de caravanas del norte a Egipto. Está en una planicie rectangular que constituye una de las mejores zonas de pastoreo de Canaán.

19. Viene el Soñador: ni el pensar en el largo viaje que había hecho para visitarlos, ni el cansancio y el hambre que traía, ni el derecho que tenía a la hospitalidad y a su amor fraternal, aplacó la amargura de su odio. El ver su vestido los puso frenéticos.

20. Venid y matémosle: fueron dominados por la envidia y la venganza que habían fomentado secretamente durante tanto tiempo.

22. Echémosle en esta cisterna: Si no hubiese sido por Rubén, habrían realizado su intención. Después de haber persuadido a todos a que asintieran a su plan, Rubén se alejó del grupo, temiendo no poder dominar sus sentimientos, y descubrir su verdadera intención. Su plan fracasó debido a su falta de determinación y vigilancia.

23. Cuando llegó José: Cuando llegó José fue objeto de miradas iracundas y vengadoras que lo aterraron. Le asieron y le quitaron sus vestiduras. No atendieron a sus súplicas. Se encontró a merced del poder de aquellos hombres encolerizados. Llevándolo brutalmente a una cisterna profunda, le echaron adentro. Lo dejaron allí para que pereciese de hambre. Pero algunos de ellos estaban inquietos; no sentían la satisfacción que habían esperado de su venganza.

25. Se sentaron a comer pan: indiferentes al dolor de su hno.

25. Una compañía de Ismaelitas: grupo de viajeros, especialmente de comerciantes, y por lo tanto, quizá podría traducirse adecuadamente "caravana”. La llegada de la caravana en ese preciso momento fue el medio elegido por el cielo para salvar a José de la perversa maquinación contra su vida, y la salvación de ésta a su vez se convirtió en un medio por el cual resultó salvada la vida de sus propios hermanos

25. Venía de Galaad: Esta ruta en Transjordania cruzaba el Jordán en las proximidades de Bet-san, en el extremo oriental del valle de Esdraelón, seguía el valle de Jenin y luego volvía hacia el sur para cruzar la cadena del Carmelo. Pasando por la planicie de Dotán, continuaba hacia el sur por el camino de Er Ramle y Gaza hacia Egipto.

25. Aromas: probablemente se usaban como un ingrediente para preparar el incienso, o como un cosmético.

25. Bálsamo: Probablemente la goma del árbol lentisco y el terebinto.

25. Mirra: Es dudoso el significado de la palabra así traducida. Generalmente se entiende que se refiere al ládano, una goma aromática exudada por las hojas del cisto, o lo que hoy se conoce como mirra. Otros piensan que debe ser la corteza resinosa del lentisco.

28. Madianitas: Los mercaderes son llamados "ismaelitas" en los vers. 25, 27 y 28, y "madianitas" en los vers. 28 y 36. Esto se ha explicado suponiendo que ambos grupos estaban representados en la caravana, o que los dos nombres eran usados como sinónimos en el habla común.

28. Y le vendieron: Llegar a ser esclavo era una suerte más temible que la muerte. Imploró a uno y a otro. Algunos fueron conmovidos pero el temor al ridículo. . .Todos tuvieron la impresión que habían llegado muy lejos para retroceder. José los acusaría ante su padre. Ningún hombre tiene derecho de someter a otro a una servidumbre involuntaria.

28. Veinte piezas de plata: era mucho menos que el precio promedio de un esclavo.  De acuerdo con Exo. 21: 32, parece haber sido de 30 siclos, probablemente el precio de reventa que los ismaelitas esperaban recibir por José en Egipto.

29. Rasgó sus vestidos: antigua costumbre que expresaba gran pesar y dolor.

30. Volvió Rubén a sus hnos.: Cuando supo la suerte de José, y que ya era imposible rescatarlo, Rubén se vio obligado a unirse con los demás en la tentativa de ocultar su culpa.

31. Tomaron ellos la túnica de José: Sin duda los hijos de Jacob no sólo habían untado la túnica con sangre sino que también la habían roto en jirones para hacer más vívida la evidencia de la desgracia de José y más verosímil su relato. El objeto que una vez simbolizó el imprudente favoritismo de Jacob por José, ahora llegó a representar la ruina de ambos, padre e hijo.

32. Enviaron la túnica: no tenían ni la descarada osadía para cumplirlo personalmente ni el valor para contemplar el primer estallido de dolor de su padre. Hicieron pues arreglos para que otro, probablemente un esclavo, que no sabía del asunto nada sino lo que se le dijo.

34. Puso cilicio sobre sus lomos: Se trataba de una tela áspera, de pelo grueso, con la cual también se hacían las bolsas de los cereales. En Gén. 42: 25 la misma palabra se traduce "sacos".

34. Guardó luto por su hijo por muchos días: No estaban preparados para la angustia desgarradora ni para el completo abandono al dolor de Jacob. El tiempo no parecía aliviar su dolor. Los jóvenes estaban aterrados por lo que habían hecho; y sin embargo, espantados por los reproches que les haría su padre, seguían ocultando en sus propios corazones el conocimiento de su culpa, que aun a ellos mismos les parecía enorme.

José lloró amargamente al pensar en la soledad y el dolor de aquel padre amoroso. Nuevamente recordó la escena de Dotán. Vio a sus airados hermanos y sintió sus miradas furiosas dirigidas hacia él. Las punzantes e injuriosas palabras con que habían contestado a sus súplicas angustiosas resonaban aún en sus oídos. Durante algún tiempo se entregó al dolor y al terror sin poder dominarse. Aprendió en pocas horas lo que le hubiera tomado años. Su padre le había hecho daño por su parcialidad y complacencia. Se había fomentado defectos que ahora debía corregir. Estaba comenzando a confiar en sí mismo y a ser exigente. Allí mismo se entregó por completo al Señor y oró. Tomó la alta resolución de mostrarse fiel a Dios y de obrar en cualquier circunstancia cómo convenía a un súbdito del Rey de los cielos. Serviría al Señor con corazón íntegro; afrontaría con toda fortaleza las pruebas que le deparara su suerte, y cumpliría todo deber con fidelidad. José pasó de niño mimado a hombre reflexivo, valiente y sereno.

Potifar: aquel a quien [el dios] Re' ha dado. A su servicio permaneció José diez años.

Allí estuvo expuesto a tentaciones extraordinarias. Estaba en medio de la idolatría. La adoración de dioses falsos estaba rodeada de toda la pompa de la realeza, sostenida por la riqueza y la cultura de la nación más altamente civilizada de aquel entonces. Las escenas y la seducción del vicio le circundaban por todas partes, pero él permaneció como quien no veía ni oía. No permitió que sus pensamientos se detuvieran en asuntos prohibidos. No se avergonzó de la religión de sus padres, ni lo escondió.

36. Oficial de Faraón: La palabra hebrea traducida como "oficial" es saris, que significa en primer lugar "eunuco".

36. Capitán de la guardia: probablemente era el jefe de los verdugos, o quizá de la guardia personal de Faraón.

38. Adulam: está a unos 20 km. al sudoeste de Belén, en un sitio ahora llamado Tell esh-Sheij Madkur, y aproximadamente a la misma distancia al noroeste de Hebrón.

2. Vio a la hija de un cananeo y la tomó: los hijos de Jacob, olvidando la sagrada vocación de su raza, estuvieron en peligro de perecer en los pecados de Canaán. Si Dios no hubiese intervenido en su misericordia para que toda la casa de Jacob se trasladara a Egipto, la raza escogida podría haber sucumbido.

Quezib: probablemente puede identificarse con el actual lugar Tell el-Beida que está al sudoeste de Adulam.

8. Levanta descendencia a tu hno.: De acuerdo con la costumbre, Onán, como cuñado de Tamar, debería haberse casado con la viuda sin hijos de su hermano difunto para dar origen a una familia para él (levirato).

9. Vertía en tierra: Eyaculaba fuera. La conducta de Onán delata una falta de afecto natural por su hermano y demuestra que codiciaba sus posesiones y herencia. Su conducta fue una ofensa contra la institución divina del matrimonio.

11. Quédate viuda en casa de tu padre: Judá puede haber pensado que ella misma, o el casamiento con ella, en alguna forma habían ocasionado las muertes de Er y Onán. Nunca tuvo la intención de cumplir su promesa.

Timnat: Se conoce hoy día como Tibnah, está a unos 6 km. al noreste de Adulam.

13. Tu suegro sube a Timnat: Tamar se propuso tener un hijo de Judá mismo. Esto estaba completamente en armonía con las costumbres prevalecientes entre los hititas y asirios. Las leyes de los hititas y asirios contenían la cláusula de que el deber del levirato en el matrimonio había de realizarse por el padre del difunto si no había un hermano disponible.

Enaim: Probablemente en el camino entre Adulam y Timnat. Quizá la Enam de Jos. 15: 34

18. Tu sello: probablemente era un sello cilíndrico que llevaba al cuello atado con una cuerda, vocablo que se ha traducido como "cordón". Era un objeto de valor considerable, puesto que ningún negocio podía efectuarse sin él.

18. Tu báculo: Puede haber estado adornado, como era propio del hijo de un ganadero rico. Los báculos asiáticos tenían cabezas humanas talladas en la empuñadura.

24. Tu nuera ha fornicado: Tamar era considerada como desposada con Sela.

26. Más justa es que yo: Su franca confesión su trato posterior con Tamar, su éxito en criar a los hijos nacidos de ella, y el hecho de que uno de ellos fue honrado con un lugar en el linaje de Cristo, claramente demuestra una completa reforma de su parte.

Fares: rotura

29. Que brecha te has abierto: "Realmente sabias cómo empujarte hacia el frente".

Zara: levantando

39. Llevado, pues, a José a Egipto: José vivió en la mitad del período de los hicsos.

1. Fue varón próspero: su industria, su interés y su energía fueron coronados con la bendición divina. José atribuyó su éxito al favor de Dios, y hasta su amo idólatra aceptó eso como el secreto de su sin igual prosperidad. La dulzura y la fidelidad de José cautivaron el corazón de Potifar quien llegó a considerarlo como un hijo. El joven entró en contacto con hombres de alta posición y de sabiduría, adquirió conocimiento de las ciencias, los idiomas y los negocios.

9. ¿Cómo haría este gran mal y pecaría contra DIOS?: Si abrigáramos habitualmente la idea de que Dios ve y oye todo lo que hacemos y decimos, y que conserva un fiel registro de nuestras palabras y acciones, a las que deberemos hacer frente en el día final, temeríamos pecar. Ninguna parte de nuestra conducta escapa a su observación. No podemos esconder nuestros caminos al Altísimo.

12. Ella lo asió de su ropa: El vestido término medio de un hombre, desde el rey hasta el esclavo, era un taparrabo. En el caso de la realeza, era de material fino inmaculadamente limpio y almidonado. En todos los otros casos era de menos valor, y su calidad era determinada por su condición social. Los capataces ocasionalmente son pintados con un trozo de tela blanca que cuelga de sus hombros y se arrolla en torno del cuerpo.

17. El siervo hebreo vino a mí para deshonrarme: Si Potifar hubiera creído la acusación José había perdido la vida.

20. Y lo puso en la cárcel: Para salvar la reputación de la casa. Allí fue tratado con gran severidad. Pero el verdadero carácter de José resplandeció, aun en la obscuridad del calabozo. Mantuvo firmes su fe y su paciencia, eso no lo convirtió en una persona sombría ni desconfiada. Tenía la paz que emana de una inocencia consciente, y confió su caso a Dios. No caviló en los perjuicios que sufría, sino que olvidó sus penas y trató de aliviar las de los demás. DIOS le estaba preparando en la escuela de la aflicción para que fuera de mayor utilidad. Presenciando los resultados de la opresión y la tiranía, y los efectos del crimen, aprendió lecciones de justicia, solidaridad y misericordia, lo prepararían para ejercer el poder con sabiduría y compasión.