Salmo 1
Es uno de los
didácticos o sapienciales. Presenta brevemente, en forma poética, una ley espiritual: que la
justicia lleva al éxito, y la injusticia al fracaso. Es similar a la poesía sentenciosa y moralizante de Proverbios.
Constituye, junto con el Sal. 2, una introducción a todo el libro de Salmos, y
sobre todo al primer libro del salterio. Por esto se lo ha llamado "salmo
del umbral". Es un
sermón paleotestamentario en cuanto a la felicidad de aquel que vive
enteramente consagrado a Dios y a la total destrucción que aguarda al que no da
lugar a Dios en su vida. Está estructurado tan cuidadosamente como un soneto y
se divide en dos estrofas que contrastan entre sí. En los vers. 1-3 se describe
la felicidad del bueno que deliberadamente evita el mal y proclama su deleite
en la ley de Dios. En los vers. 4-6 se describe la desdicha del malo,
representado por el tamo; se declara cuál será el fin de su vida.
1. Bienaventurado: En este pasaje parece usarse como una
interjección: "¡Oh, la felicidad del hombre!" La felicidad comprende
bendiciones materiales y espirituales, puesto que ambas son el resultado de
andar por los caminos de Dios.
1. Que no anduvo en consejo de malos: no se conforma con las costumbres mundanas. Expresa
la idea de impiedad, en contraposición a la "justicia". Sugiere una
violación premeditada y persistente de las órdenes de Dios.
1. Ni estuvo en camino de pecadores: no se ha detenido para asociarse con los
rebeldes que han caído bajo el hechizo del pecado y jugar con la tentación.
"Errar el blanco", ya sea por ignorancia o por falta de fibra moral.
1. Ni en silla de escarnecedores se ha sentado: Unirse en forma definitiva con un
grupo de pecadores. La persona piadosa no se halla en compañía de los que premeditadamente
eligen el mal y encuentran placer en ejercer su influencia perniciosa sobre
otros.
Estos tres verbos de este vers. presentan en orden de intensidad
creciente las etapas de una vida dedicada al mal. Este versículo es un ejemplo
típico de paralelismo sintético.
2. En la ley de JEHOVA esta su delicia: Encuentra placer constante en reflexionar en la
ley de Dios. Estudia la Palabra de Dios en forma habitual y regular. Este
estudio no le resulta tedioso.
2. En su ley: Heb. torah, que
significa básicamente "instrucción" o "precepto", o también
"orden" o "ley", en su sentido habitual. En general, torah
se refiere a la revelación escrita de la voluntad de Dios.
2. Medita de día y de noche: Heb. hagah, "hablar entre dientes",
"murmurar". De allí las ideas de "leer en voz baja",
"soliloquiar", "meditar”.
3. Árbol plantado junto a corrientes de agua: El cristiano, unido a Dios, su
fuente de vida y fuerza.
3. Corrientes de agua: Heb. péleg. Este vocablo indica acequias o
canales de riego, lo que sugeriría aún más el cuidado prodigado al árbol
3. Da fruto a su tiempo: El hebreo usa el tiempo imperfecto del verbo,
lo cual indica que la acción se repite. El fruto del Espíritu Ga. 5: 22-23
3. Su hoja no cae: Así como el árbol se arraiga en la tierra firme y absorbe humedad del
manantial, también la persona piadosa echa raíces en las fuentes de la
salvación y de allí obtiene alimento. Está firme, sólida y segura. Así, aunque
puedan sobrevenirle dificultades y tentaciones, se mantendrá firme. Cuanto
mayor la prueba, tanto más profundamente ahondará las raíces y se aferrará a
Dios.
3. Todo lo que hace prosperará: El hombre bueno
prospera en cualquier empresa a que se dedique. No importa si en su empeño triunfa
o fracasa, la confianza que tiene en Dios permite que el bueno extraiga vida de
la Fuente eterna llegue finalmente a su meta.
Como resultado de su consagración a la Palabra de Dios, a la persona
piadosa se prometen tres bendiciones: (1) que vivirá una vida útil y producirá
los frutos del Espíritu (Heb. 12: 11); (2) que siempre estará lozana y vigorosa
(Sal. 92:12, 13); (3) que finalmente triunfará en sus empresas
4. Son como el tamo: Polvo o paja muy menuda de varias semillas
trilladas, como el trigo, el lino, etc. el tamo no tiene raíz ni lugar fijo. Como es
algo muerto, seco e inútil, está a merced de los elementos. Los impíos no
tienen asidero alguno; les falta estabilidad y no pueden perdurar.
4. Que arrebata e viento: A primera vista, el tamo es libre;
pero lo cierto es que es esclavo de su ambiente. El tamo, suelto, separado de
la fuente vigorizante, nada produce. Tiene una libertad que no vale la pena
poseer.
Hay una paradoja en
estos dos símiles. Aparentemente el árbol parece estar prisionero; pero en
realidad es libre; crece y lleva fruto.
5. No se levantarán los malos en el juicio: "No resistirán en el juicio" (BJ). Esto ocurrirá sobre todo
en el juicio final.
6. Porque JEHOVA conoce el camino de
los justos: la
razón definitiva del fin diferente de los dos caminos. Como Dios conoce, él
discrimina y aprueba o condena en armonía con las normas eternas.
Salmo 2
El primero de los salmos mesiánicos.
Ha recibido el nombre de "Canto del Ungido de
Jehová". Estructuralmente,
este salmo consta de cuatro partes, y cada estrofa tiene casi el mismo número
de palabras. En la primera estrofa (vers. 1-3) se presenta un cuadro
de los encumbrados y poderosos de la tierra que desafían al Rey del universo y
a su Ungido. En la segunda (vers. 4-6), a modo de contraste, se
presenta el desdén con el cual el Señor considera sus burlas, y establece al
Mesías como rey en Sion. En la tercera (vers. 7-9) se
presenta al Hijo de Dios mientras contempla el decreto que lo constituyó como
dueño legítimo del mundo. La cuarta (vers. 10-12) nos
aconseja que nos sometamos al Ungido de Jehová. El salmo termina con una
bendición (vers. 12).
En la segunda parte del oratorio El Mesías, Haendel usó los vers. 1-4 y
9 de este salmo como texto del aria para bajo, coro y recitativo, y el aria
para tenor que preceden inmediatamente al coro del Aleluya.
1. ¿Porque se amotinan las gentes?: Para los hebreos, las "gentes" o
"naciones" eran los pueblos idólatras que rodeaban a Israel. Se
presenta un cuadro de violenta confusión, tumulto. Lutero hizo la siguiente paráfrasis: "¿Cómo pueden triunfar los que
se oponen a Jehová y a su Cristo?"
1. ¿Piensan cosas vanas. . .?: Estos pecadores deliberan en cuanto a algo
que no puede realizarse. Todo lo que se proponen contra el gobierno de Dios,
sin duda fracasará.
2. Se levantarán los reyes de la tierra: decidida resistencia de los líderes que se
oponen al rey JEHOVÁ.
3. Contra su Ungido: Heb. mashíaj. Según la costumbre de la antigüedad, se
vertía aceite sobre la cabeza de sacerdotes y reyes cuando se los consagraba
para el ejercicio de sus funciones.
3. Rompamos sus ligaduras: Se representa aquí a los que se rebelan
contra Dios y declaran su deseo de quebrantar las restricciones impuestas por
su autoridad. En vez de describir la acción, el poeta
presenta a los rebeldes que proclaman en forma desafiante sus intenciones de
liberarse.
4. El Señor se burlará de ellos: Los autores
bíblicos describen a Dios como si tuviera atributos humanos. Se representa a
Jehová como sentado serenamente en los cielos (ver Ed 169), riéndose de los
vanos intentos de los rebeldes. La Providencia que todo lo rige impide que se realicen los designios
de las personas de corazón corrupto y entorpece su camino.
5. Luego hablará a ellos en su furor: La aparente indiferencia de Dios no durará
para siempre. La palabra "luego" implica que finalmente Dios
declarará su propósito.
6. Pero yo he puesto a mi Rey: "Pero yo he
consagrado a mi Rey" (BC).
Sion: nombre de la colina meridional de la ciudad de Jerusalén, se
transforma en el nombre poético de la ciudad.
7. Yo publicaré el decreto: Habla JESUS, para interpretar la gran
declaración divina de que él es su Hijo. Es Mesías por decreto de su Padre.
Este decreto implica (1) que se ha de reconocer a Jesús como Hijo de Dios y (2)
que su reino debe ser universal. La resurrección
de los muertos proclamó, de modo muy especial, que Jesús era Hijo de Dios (Rom.
1: 4).
7. Yo te engendré hoy: No debe entenderse que esta declaración implique que originalmente el
Hijo hubiese sido engendrado. "En Cristo hay vida original, que no
proviene ni deriva de otra. Este vers. se interpreta como una predicción de la
resurrección de Jesús (Hech. 13: 30-33).
8. Pídeme:
La relación existente entre Jehová y el Mesías es tal
que cualquier pedido del Hijo será concedido.
8. Te daré por herencia las naciones: cualquier intento de los rebeldes para
derrocar el gobierno del Ungido será totalmente inútil. Como heredero, el Hijo
hereda todas las cosas.
9. Los quebrantarás con vara de Hierro: Simboliza el cetro del dominio. Se subyugará
totalmente a los enemigos del Mesías.
10. Oh reyes, sed prudentes: El salmista, como quien suplica a sus
hermanos, exhorta solemnemente a los dirigentes de la rebelión para que se
sometan. Rebelarse es una necedad.
10. Admitid amonestación: "sed
disciplinados". Aconseja a los dirigentes que reconozcan su deber para con
Jehová y su Mesías, y concedan el apoyo de su influencia para que se cumpla ese
deber.
11. Servid a JEHOVA con temor: sugiere una humilde reverencia mezclada con
aprensión.
12. Honrad al hijo: El hebreo dice: "Besad al hijo", lo
que debe entenderse como una forma de reverencia. La palabra "besar"
sugiere la costumbre del antiguo Cercano Oriente de honrar a las personas de
categoría superior. Tanto la LXX como la Vulgata rezan: "Aferraos a la
instrucción"; aquí se usa la palabra aramea bar; Después del exilio, los
judíos usaron este vocablo para referirse a las admoniciones de la Torah. La
palabra que se traduce "besar" es nashaq, que también significa
"unirse" "juntar”.
12. Bienaventurados todos los que en EL confían: Todos los seres humanos, en todas
las edades, y en todas las naciones, han pecado y necesitan un Salvador.
Bienaventurados los que reconocen su necesidad y depositan su confianza en el
Mesías.
Es el solemne deber del cristiano exhortar a sus semejantes para que se
arrepientan de sus pecados y se sometan al gobierno de Jesús, el Ungido Hijo de
Dios. Se ha dicho que el Sal. 2 podría llamarse "El himno misionero del
Mesías".
Existe una relación complementaria entre los Salmos 1 y 2: el primero
canta la bienaventuranza de la vida del piadoso, dedicada a la meditación en la
ley de Dios, y el fracaso final de los impíos; el segundo, muestra la
inutilidad de la rebelión universal contra el Señor y la bienaventuranza de los
pueblos que confían en el Hijo de Dios. El Sal. 1 describe los dos caminos que
se abren ante el individuo; el Sal. 2 presenta los dos caminos que pueden
escoger los pueblos. El Sal. 1 comienza con una bienaventuranza; el Sal. 2
termina con una bienaventuranza. Podría decirse que el tema del Sal. 2 se
resume en el conocido refrán: "El hombre propone y Dios dispone".
Salmo 3
Lleva el nombre de "Oración Matutina". Está estrechamente
relacionado con el Sal. 4, una "Oración Vespertina", salmo que podría
considerarse como una consecuencia del 3. Consta de cuatro estrofas: (1) el peligro presente
(vers.1, 2); (2) el recuerdo de ayuda recibida en lo pasado (vers.3, 4), (3) la
sensación de seguridad en medio del peligro presente (vers.5, 6), y (4) la
oración en busca del triunfo sobre los enemigos (vers.7). La poesía concluye
con una exclamación de confianza y una plegaria para que Dios bendiga a su
pueblo (vers.8). En medio de la poesía hay un cambio repentino y dramático: del
cansancio y la depresión de la noche, a la confianza y la fe triunfante de la
nueva mañana. Se dice que durante las guerras religiosas francesas, los
hugonotes del ejército de Condé cantaban este salmo cuando se hacía el cambio
de la guardia.
Salmo: Heb. mizmor. Canto que debía entonarse con acompañamiento de
instrumentos de cuerda.
1. Cuánto se han multiplicado mis adversarios: Absalón tenía muchos seguidores.
Casi todo Israel se había rebelado.
Selah: En este salmo parece indicar la división en estrofas.
3. El que levanta mi
cabeza: Cuando David huyó estaba doblegado por la
humillación.
4. Con mi voz clamé: El hebreo usa la forma imperfecta del verbo, lo que muchas veces
indica que la acción debe considerarse repetida o habitual.
4. Desde su monte santo: Sion. En la literatura ugarítica, el "santo
monte" a menudo designa la morada celestial de una deidad. David había llevado el arca a la
ciudad santa, y era natural que considerara que esta fortaleza fuera el lugar
de la morada especial de Dios.
5. Yo me acosté y dormí y desperté: David se representa como si estuviera en
peligro de ser atacado en cualquier momento de la noche, perseguido por sus
enemigos y objeto de sus maldiciones. Sin embargo, puede acostarse en paz y
dormir por su gran confianza en Dios, en cuyas manos estaba todo. Su sueño no
era producido por un mero cansancio, ni por indolencia, ni por presunción; era
un acto de fe. La calma interior lo fortalecía para la lucha del día siguiente.
7. Tú heriste a todos mis enemigos: El salmista expresa su confianza en que Dios
aplastará a sus enemigos. Considera el resultado de la batalla como una
realidad ya lograda.
8. Sobre tu pueblo sea tu bendición: David magnánimamente deja de pensar en sí
mismo y en su propio peligro, para pensar en la condición de su pueblo, de su
nación, no sólo de los que le habían permanecido leales, sino también de los
que se habían rebelado.